Las recientes tensiones entre Rusia y el grupo Wagner han creado una oportunidad única para Ucrania. Yevgeny Prigozhin, líder de Wagner, desafió al Kremlin con un levantamiento que duró varias horas. Por su parte, Estados Unidos reporta que la postura nuclear de Rusia no ha cambiado durante este incidente.
El sábado, el líder de Wagner anunció que detendría su marcha sobre Moscú. Al mismo tiempo, Prigozhin fue visto dejando Rostov del Don con otros combatientes de Wagner. Aparentemente, el presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko, negoció un acuerdo con Prigozhin para que se trasladara a Bielorrusia y pusiera fin a su insurrección armada.
En medio de este caos, se especula que el acuerdo negociado por Lukashenko podría incluir la destitución de altos funcionarios del Ministerio de Defensa ruso, aunque aún no se han confirmado los detalles de la negociación.
Sin embargo, el Kremlin ha anunciado que los cargos contra Prigozhin y los mercenarios de Wagner han sido retirados. Los que no participaron en el levantamiento firmarán un contrato con el Ministerio de Defensa ruso. A pesar de todo, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, asegura que la invasión de Ucrania continuará con normalidad.
Ucrania saca partido al levantamiento del grupo Wagner
Mientras tanto, en Ucrania, se registraron cinco víctimas mortales debido a un atentado en la capital, Kiev. Durante el levantamiento de Prigozhin, Ucrania ha aprovechado la situación y ha avanzado en diferentes frentes de su contraofensiva. La desestabilización en Rusia ha permitido a las fuerzas de Kiev progresar en su lucha.
Este escenario pone a Ucrania en una posición de ventaja. A medida que las fuerzas rusas se ven interrumpidas por conflictos internos, Ucrania tiene la oportunidad de fortalecer su posición y avanzar en su contraofensiva. Sin embargo, el futuro sigue siendo incierto y la situación está en constante cambio.
Fuente: El Confidencial
