En la última semana han sido declarados tres graves incendios en la comunidad extremeña, dejando arrasadas un total de 6.200 hectáreas.
En concreto, los incendios han ocurrido en Las Hurdes, Casas de Miravete (que afectó al Parque Nacional de Monfragüe) y el Valle del Jerte, Aunque los dos primeros ya están controlados y su nivel de peligrosidad ha caído, se mantendrán cinco unidades de tierra y un medio aéreo que trabajan con cautela por posibles reproducciones.
La situación de los incendios
El incendio del Jerte, que fue provocado y con dos puntos de origen, afectó durante el fin de semana a la Garganta de los Infiernos. Actualmente, el incendio se encuentra controlado y con buena evolución.
Según las primeras estimaciones, el incendio de Casas de Miravete ha sido el que más pérdidas ha sufrido. Con unas 3.239 hectáreas calcinadas, más de 300 dentro del Parque Nacional y el resto incluidas en la Reserva de La Biosfera de Monfragüe.
El incendio situado en Las Hurdes afectó a 2.864 hectáreas de terreno extremeño, mientras que en el Valle del Jerte ardieron 168 hectáreas.
El turismo
Tras lo sucedido, la Federación de Turismo Rural de Extremadura llamó a la calma. “La temporada sigue adelante, se siguen recibiendo llamadas para hacer reservas. Extremadura, en general, y Las Hurdes, El Jerte y Monfragüe en particular, siguen ofreciendo lugares hermosos donde disfrutar de unas vacaciones”.
Víctor Bazaga, presidente de Fextur, ha declarado que las zonas afectadas por los incendios son una pequeña parte de estas mientras mientras que las cancelaciones que se han producido han sido mínimas y localizadas.
Por lo tanto, la Asociación de Turismo del Valle del Jerte recalcó que la comarca se encuentra en total normalidad: «El incendio está apagado y sólo ha afectado a una pequeña zona de la parte alta de la Garganta de los Infiernos en la que no hay situada ninguna ruta turística».
Además, destaca que «la zona de baños de esta reserva natural no ha sido afectada y en ningún momento se ha desalojado ningún establecimiento, ni ningún pueblo, ni esta posibilidad ha estado nunca sobre la mesa».
Fuente: El Mundo
