Elegir correctamente la valla metálica que necesitas para cercar un terreno de tu propiedad puede marcar la diferencia entre una instalación funcional o una instalación que se puede considerar como insuficiente o incluso inútil. Muchos pueden ser lo motivos para colocar este tipo de vallado, por ello uno de los puntos más vitales a la hora de realizar una instalación de este tipo es el tipo de terreno sobre el que se va a trabajar. A lo largo de este pequeño artículo, intentaremos ayudarte a identificar y seleccionar el tipo de valla metálica que más se adecua en tu caso.
¿Por qué optar por una valla metálica?
La valla metálica es una solución versátil, duradera y económica. Su instalación es muy sencilla y su mantenimiento mínimo. A todo esto, hay que añadir que este tipo de instrumento ofrece distintos niveles de seguridad y estética. Otro de los apartados positivos es que las vallas metálicas se adecuan a cada tipo de terreno, lo que las convierte en la alternativa perfecta frente a otro tipo de cerramiento.
Tipos de terrenos y valla metálica recomendada
Terrenos agrícolas o rústicos
La mejor solución para terrenos rurales o amplios, es decantarse por una malla anudada o ganadera. Este tipo de “vallado” es muy económico ya que, permite limitar grandes superficies a un costo muy asequibles. Otro apartado interesante dentro de este vallado es que permite la entrada de aire y no limita la visibilidad de forma total, lo que lo hace perfecto para zonas con ganado o cultivos entre otros.
Parcelas residenciales o jardines
Si lo que se desea es acotar el terreno de una vivienda o un espacio ajardinado, la mejor opción sin duda es una malla electrosoldada y plastificada. Este tipo de valla, ofrece una mayor seguridad frente a otros tipos mientras que también ofrece un toque estético o la posibilidad de añadir nuevos elementos como decoraciones o vegetación. Por último, su robustez resiste mejor al tiempo o a las inclemencias del clima.
Terrenos industriales o comerciales
La opción más adecuada y utilizada en espacios donde se necesita realizar un cerramiento por causas de protección como pueden ser fábricas o almacenes entre otros, son las verjas barroteras o de chapa perforada en las que se pueden añadir algún complemento como concertinas o alambre de espino. Este tipo de vallado es el ideal para esta función ya que evita el acceso de personas no autorizadas y presentan una gran resistencia frente impactos.
Terrenos irregulares o con desniveles
Para terrenos situados en bajadas, pendientes o con cierto nivel de irregularidad, la mejor elección es colocar e instalar una valla flexible como puede ser una malla de simple torsión. Este tipo de estructura, se adapta cómodamente al irregular relieve que presenta el terreno facilitando su montaje y reduciendo el desnivel del suelo.
¿Qué debemos tener en cuenta a la hora de instalar una valla metálica?
Antes de decidirse por una tipología de valla u otra, es necesario hacer un pequeño estudio y tener en cuenta varios apartados como estos:
Altura y grosor de la malla
Para mayor seguridad, elige una malla más alta y que cuente con un mayor grosor que cuente con una mayor resistencia frente a impactos externos.
Tipo de recubrimiento
Galvanizado o plastificado, el recubrimiento es un factor imprescindible a la hora de elegir un tipo de valla ya que la climatología puede ser un gran enemigo.
Normativa local
Las leyes son importantes, por ello es de vital importancia asegurarse que de instalar un vallado que cumpla la legislación vigente.
Presupuesto
Evidentemente, es un punto crucial dentro de la elección. Algún tipo de vallado, requiere de postes o accesorios más específicos lo cual puede aumentar el coste de su instalación.
Especialistas en vallas metálicas
No existe la valla metálica ideal, todo dependerá del terreno, lugar y espacio donde se quiera situar. Lo más acertado para escoger la valla que se necesita es meditar y comparar las diversas opciones. Otro asunto fundamental es conocer una empresa especializada en este tipo de trabajos, ya que instalar un valla metálico que aporte seguridad, resistencia e incluso discreción es una inversión de primer nivel.
