La logística interna está cambiando a pasos agigantados. Las empresas buscan maneras de mejorar su eficiencia sin disparar los costes. En ese proceso, la elección de los sistemas de transporte y almacenamiento es clave. No se trata solo de mover cosas. Se trata de hacerlo rápido, seguro y con el menor esfuerzo posible.
¿Cómo elegir el sistema de transporte ideal dentro de una nave industrial?
Es una de las preguntas más frecuentes entre responsables de almacenes y responsables de producción. Y la respuesta suele empezar por una buena elección de los carros plataforma. Estos equipos, aparentemente simples, marcan una diferencia brutal en el día a día de cualquier operativa.
Los carros plataforma permiten mover cargas pesadas con agilidad, sin forzar a los operarios y manteniendo el orden dentro del espacio de trabajo. Existen versiones con diferentes capacidades, materiales, ruedas, empuñaduras y diseños. Pero no todos cumplen con los mismos requisitos.
Tipos de carros plataforma y cómo sacarles el máximo partido
Para elegir el modelo adecuado, conviene tener en cuenta:
- El peso máximo que soporta.
- El tipo de ruedas (fijas o giratorias).
- Si permite el apilado o plegado.
- El material de fabricación (acero, aluminio, plástico de alta resistencia).
Una buena práctica es combinar varios modelos según la zona del almacén. Por ejemplo, en zonas de picking puede ser útil un carro ligero y maniobrable. En cambio, para mover palets o contenedores grandes, conviene uno robusto y de mayor capacidad.
Ventajas de los contenedores plegables en logística interna
Otra pieza clave en la eficiencia del almacén moderno es el uso de los contenedores plegables. Estos sistemas de almacenamiento permiten ahorrar espacio cuando no están en uso, lo que se traduce en menos metros cuadrados desaprovechados.
En un mundo donde el coste por metro es cada vez más alto, optimizar el espacio ya no es opcional. Es una necesidad. Y aquí es donde entran en juego los contenedores plegables. Su diseño permite que, una vez vacíos, puedan plegarse y apilarse de forma compacta.
¿Cuándo merece la pena invertir en contenedores plegables?
- Cuando el flujo de productos es estacional o variable.
- Si necesitas transportar mercancía de vuelta en vacío.
- En procesos donde se requiere limpieza frecuente de los envases.
Además, los hay de plástico, metálicos, con puertas abatibles, accesos laterales o sistemas de cierre seguro. Esto los hace muy versátiles en sectores como la automoción, la alimentación o la logística inversa.
Sinergia entre carros plataforma y contenedores plegables
La combinación de ambos sistemas multiplica su eficacia. Transportar contenedores plegables sobre carros plataforma permite una logística interna fluida, modular y adaptable. Y si además los carros tienen sistemas de encaje o freno, el nivel de seguridad y ergonomía se dispara.
Lo que no te cuentan y deberías tener en cuenta
- El diseño ergonómico reduce lesiones y bajas laborales.
- La estandarización de formatos agiliza los procesos.
- Una inversión inicial inteligente se traduce en menos reposiciones y mayor durabilidad.
En definitiva, no se trata solo de tener buenos productos. Se trata de entender cómo se integran en el día a día de tu operativa. Y ahí es donde estos sistemas marcan la diferencia real.