El mundo del fútbol muestra su rechazo al régimen iraní después de la sentencia de pena de muerte a un futbolista por participar en las protestas a favor de los derechos de la mujer. La Federación Internacional de Asociaciones de Futbolistas Profesionales (FIFPRO) ha denunciado la situación a través de sus redes sociales. Asimismo, ha solicitado el levantamiento inmediato de la orden de ejecución con la que el régimen iraní pretende castigarle.
“FIFPRO está en estado de shock por las informaciones que nos llegan de que el jugador profesional Amir Nasr-Azadani se enfrenta a la ejecución en Irán por apoyar la campaña de solidaridad con los derechos de las mujeres. Ahora pagará el precio máximo por sus protestas. Nos solidarizamos con Amir y exigimos que se elimine inmediatamente su sentencia”, comunicaba FIFPRO a través de su cuenta de Twitter.
La situación actual es bastante inestable. Las protestas iniciadas a mediados de septiembre por la brutalidad policial y posterior asesinato de una joven iraní por llevar “mal puesto” el velo han desembocado en un clima de hostilidad y violencia entre la población civil y el régimen de Alí Jamenei.
Una de las protestas que mayor repercusión generó fue la de la selección iraní durante el primer partido del Mundial. Los futbolistas de Irán se negaron a cantar el himno como señal de protesta por los derechos de la mujer.
El futbolista se enfrenta a un delito de «enemistad con Dios»
Las protestas no sentaron nada bien a los máximos dirigentes del país persa. Estos llegaron a amenazar a las familias de los jugadores si no cesaban en sus protestas. El futbolista de primera división de Irán, Amir Nasr-Azadani, fue detenido por expresar públicamente su apoyo a estas protestas.
El presidente del Tribunal Supremo de la provincia de Isfahán confirmo el pasado domingo que se ha acusado a Azadani «moharebeh«. Este delito comprende una supuesta “traición a la patria” y la “enemistad con Dios”, que deben ser castigadas con la muerte según las leyes del régimen.
Fuente: El Mundo
