Tras meses de ascenso, el Euríbor muestra una inesperada caída en agosto, generando expectativas y análisis en el mercado hipotecario español.
Tras 20 meses de ascenso constante, el Euríbor a 12 meses, el índice predominante para préstamos hipotecarios a tipo variable en España, ha mostrado una ligera disminución. Según datos recopilados, se espera que el índice se sitúe en torno al 4,07% en agosto, marcando su primera caída desde enero de 2022. Esta cifra contrasta con el 4,149% registrado en julio, que fue su nivel más alto desde 2008. A pesar de la reciente disminución, el índice sigue siendo significativamente más alto que en agosto de 2022, cuando se situó en el 1,249%.
Para aquellos con hipotecas variables, esta fluctuación tiene implicaciones directas. Por ejemplo, una persona con una hipoteca variable de 150.000 euros a 30 años y un diferencial del 0,99% más Euríbor, al revisar su tipo de interés en agosto, podría ver un aumento en su cuota hipotecaria de aproximadamente 238 euros al mes. Esto es menor en comparación con el incremento de 265 euros que se observó en julio. Como resultado, la cuota hipotecaria mensual podría aumentar de 572 euros a aproximadamente 810 euros.
Perspectivas y análisis del mercado
Simone Colombelli, director de hipotecas del comparador iAhorro, advierte sobre sacar conclusiones precipitadas. Aunque agosto históricamente ha mostrado tendencias a la baja, Colombelli sugiere que lo que se observa podría ser simplemente una «pequeña estacionalidad en los datos». El experto recuerda que, en agosto de 2022, el índice se situó en un 1,249%, solo un ligero aumento desde julio. Sin embargo, en septiembre de ese año, el índice saltó casi un punto porcentual.
Mirando hacia el futuro, iAhorro anticipa que el Euríbor podría experimentar ligeras fluctuaciones en el último trimestre de 2023. Aunque 2024 podría ser un año desafiante, se espera una disminución hacia finales de ese año y principios de 2025.
Miquel Riera, especialista en hipotecas de HelpMyCash, interpreta la reciente disminución como una señal de que las entidades bancarias anticipan que el Banco Central Europeo (BCE) podría detener sus incrementos de tipos en el futuro cercano. Riera sugiere que las entidades están ajustando sus precios en función de las expectativas a medio plazo. Aunque es probable que el BCE aumente los tipos en septiembre u octubre para contener la inflación, el Euríbor podría estabilizarse entre el 4% y el 4,5% para fin de año.
En resumen, aunque el Euríbor ha mostrado una ligera disminución en agosto, los expertos aconsejan cautela antes de interpretar esto como una tendencia a largo plazo. Las fluctuaciones en el índice tienen implicaciones directas para aquellos con hipotecas variables, y es esencial estar informado y preparado para posibles cambios en el futuro.
