Los detectives privados investigan si realmente la persona está guardando cuarentena o si cumplen con sus horarios de teletrabajo. Hay empleados que aprovechan el formato del teletrabajo para irse ‘de cañas’, participar en un torneo de pádel o ir al gimnasio.
Cuando se piensa en la palabra detective solemos imaginar a un hombre con sombrero, gafas de sol y gabardina que lee el periódico mientras investiga un crimen. Nada más lejos de la realidad. Actualmente, la Investigación Privada en España es una actividad reservada a los Detectives Privados legalmente habilitados. Estos profesionales se reconocen y regularizan en la Ley 5/2014 de Seguridad Privada y en el Real Decreto 2364/1994.
Como todos los trabajos, los detectives han tenido que adaptarse a la era del coronavirus y, entre sus nuevos encargos, está el de investigar a los ‘teletrabajadores’. Por un lado, los detectives investigan si realmente la persona está cumpliendo una cuarentena y por otro que cumplan con sus horarios.
Además, también ha aumentado las investigaciones por falsos ERTE. En este caso, las agencias de detectives privados en Madrid son las que más trabajo acumulan. Los empleados contratan a detectives privados para probar que «están trabajando más horas que las que les corresponden por ERTE» y poder formalizar una denuncia.
¿En qué ocasión se contratan detectives privados?
Las empresas que suelen contratar servicios de investigación privada lo hacen porque hay una sospecha «en la trayectoria del empleado». Los seguimientos no se suelen encargar de forma sistemática o a trabajadores con un buen comportamiento.
Además «el cliente debe tener un interés legítimo y acreditarlo, por ejemplo, que el trabajador tenga bajas laborales reiteradas o una baja productividad», añade un investigador profesional.
Fuente: 20minutos
