Una de cada tres empleadas en el sector del servicio doméstico vive por debajo del umbral de la pobreza, según un informe publicado por Oxfam Intermón.
Oxfam Intermón denuncia que el 32,5% de las empleadas del hogar vive bajo el umbral de la pobreza en España. La situación se complica aún más para una de cada seis, que están en pobreza severa y sobreviven con menos de 16 euros al día.
En el Día Internacional de las Trabajadoras del Hogar, la ONG lamenta que los empleadores no están abonando las cotizaciones correspondientes y colaboren en la economía sumergida. Las cifras serían equivalentes a «2.600 millones de euros en salarios y a 820 millones de euros que está perdiendo la Seguridad Social«.
Con la pandemia, esa situación no mejoró en absoluto. Durante la primera ola del virus se destruyeron tres empleos de trabajadoras del hogar por cada uno del conjunto del mercado. Así, se perdió el 8,3% del trabajo de este colectivo, frente al 2,6% del total.
Según el informe publicado por Oxfam, tres millones de hogares (el 16,2% de las familias) tuvieron gastos en trabajo del hogar y de cuidados. Además, se destinaron 7.247 millones de euros al pago de salarios y seguridad social.
El servicio doméstico en Madrid es el más vulnerable
En España, el 5% del total de trabajadoras es empleada del hogar, pero con grandes diferencias entre regiones. La Comunidad de Madrid es la que mayor número de trabajadoras de servicio doméstico acumula, representando el 7,5% del conjunto de trabajadoras, Por otro lado, en Canarias o Extremadura son el 2,9% y el 2,8%, respectivamente.
Para asegurar que la contratación de las prestaciones en el hogar se hace de forma correcta y legal es recomendable acudir a una agencia de servicio doméstico en Madrid. Estos profesionales aseguran los derechos de todas sus trabajadoras y evitan que se ejerzan abuso sobre las mismas
El estudio explica que el empleo del hogar sigue considerándose como un «sector refugio» para las empleadas españolas en las regiones con menos dinamismo económico. Como dato, más de la mitad son trabajadoras extranjeras, por lo que resulta indispensable protegerlas.
Estas mujeres inmigrantes también buscan ganarse la vida de forma honrada con otras actividades complementarias a la limpieza del hogar. Una de ellas es el cuidado de ancianos a domicilio en Madrid, actividad que exige grandes esfuerzos físicos y que debe defenderse a través de la Seguridad Social.
Por desgracia, actualmente una de cada cuatro mujeres -unas 70.000 trabajadoras-, se encuentran en situación irregular.
Fuente: 20 Minutos
