Hacerse una furgoneta camper para viajar es el sueño de muchos y posiblemente te lo hayas planteado. Comprar una furgoneta para camperizar es la parte más fácil, pero ¿te has planteado todo lo que viene después?
A continuación, comentaremos los puntos más importantes a tener en cuenta a la hora de camperizar una furgoneta y cómo pueden afectar al precio final del proyecto. Ya que que puede ir desde lo más casero y sencillo hasta grandes presupuestos con acabados de lujo.
Elementos a tener en cuenta a la hora de camperizar nuestra furgoneta.
Como ya hemos visto anteriormente, el tamaño de la furgoneta es determinante a la hora de planificar nuestro proyecto. Ya sea en furgonetas compactas, medias o de gran volumen, siempre tendremos opciones a la hora de realizar la distribución.
Lógicamente cuanto mayor sea el espacio, más elementos podemos colocar o al menos con mayor libertad. Sin embargo, en este caso, podemos distribuirlos al gusto o jugando con cada elemento a base de imaginación. En las furgonetas compactas no tenemos mucho espacio, pero podemos optar por camas plegables sobre los asientos traseros plegados o directamente prescindir de los asientos traseros para colocar un módulo de cocina con unos asientos bajos que pueda servir como base para una cama extensible.
El flexómetro es el mejor amigo para quien quiere una camper, porque todo tiene que ir medido al milímetro y lo ideal es que los cortes solo se hagan una vez, puesto que muchas veces no se puede arreglar un mal corte.
En las tiendas especializadas encontraremos materiales y kits para camperizar furgonetas que más allá de los niveles de acabados, tienen ciertas características como peso, contenido o propiedades hidrófugas que hacen que en muchos casos sean elementos compartidos con el mundo de la náutica. Al fin y al cabo, los materiales que utilicemos tienen que resistir movimiento, humedad y un trato bastante intensivo.
Fuente: Motorpasión.
