El nuvo tratamiento contra el alzhéimer reduce un 27% el daño cognitivo
Tras dos décadas sin avances, comienza la carrera para dar con un tratamiento que ralentice los efectos de esta enfermedad.
Las farmacéuticas Biogen y Eisain han dado con un tratamiento experimental que retrasa el daño cognitivo de los pacientes hasta un 27%. El ensayo clínico llevado a cabo por ambas compañías, espera obtener el aprobado para el medicamento a comienzos de 2023.
El medicamento, lecanemab, surge como una nueva esperanza para obtener un tratamiento que hasta entonces se resiste a la ciencia. Biogen y a creo expectativas con el Aduhelm, las cuales se vieron frustradas.
La carrera por encontrar un tratamiento para el Alzheimer supone un negocio descomunal. En los últimos 20 años ninguna compañía ha conseguido presentar un medicamento específico para esta enfermedad. El medicamento que logre estos resultados, se convertirá en un hito histórico, científico y económico.
Los resultados del tratamiento: el ensayo clínico
Los resultados parecen ser más fiables que los logrados por el Aduhelm. El medicamento ha sido probado en 1.800 voluntarios que padecían esta enfermedad. Esto lo convierte en el ensayo clínico más grande realizado hasta la fecha.
En cuanto al ensayo, una parte de los voluntarios se les administro lecanemab dos veces al mes por vía intravenosa. Otra parte de los voluntarios fueron administrados con un placebo.
Los resultados muestran que los voluntarios tratados con el medicamento vieron reducido su deterioro cognitivo en un 27%. Aunque los resultados son claros, aun no se sabe con certeza como mejorará este medicamento en la vida diaria de los enfermos.
Los efectos positivos pudieron notarse a los 6 meses del inicio del tratamiento. Estos se vieron incrementados hasta el final del tratamiento, es decir, a los 18 meses.
En cuanto a los efectos secundarios, el 3% de los pacientes registraron inflamación, mientras que el 21% sufrió sangrado del cerebro. Estos efectos secundarios, característicos en este tipo de tratamientos, fueron mucho más inferiores a otros tratamientos experimentales.
Fuente: NIUS Diario
