La contraofensiva ucraniana está siendo todo un éxito. La retirada de tropas rusas y posterior liberación escasos días atrás de la ciudad de Jerson, al este de Ucrania, es todo un símbolo de la resistencia ofrecida por el país ucranio. Es la primera vez que el presidente, Volodímir Zelenski visita la capital de la región a orillas del río Dniéper. Esto se debe a que la ciudad portuaria cayó durante los primeros meses de guerra a manos rusas. Jerson fue la única capital regional capturada por el Kremlin y uno de los principales enclaves conquistados, ya que era un sustancial suministro de agua y energía.
Zelenski se presentó por las calles de Jerson portando el uniforme militar ucraniano, pero sin casco ni chaleco antibalas. Asimismo, iba rodeado de sus escoltas y guardias de seguridad fuertemente armados. Los vecinos ucranianos y supervivientes a la estancia militar rusa recibieron a su presidente al grito de “¡Gloria a Ucrania!”.
Este gesto sirve de motivación para el ejército ucraniano, dispuesto a frenar el avance ruso a toda costa. Se trata de todo un símbolo de su victoria y un rayo de luz que llena de esperanza al pueblo ucranio para que la paz vuelva a sus vidas y a sus tierras. Las declaraciones del presidente tras el triunfal paseo no se hicieron esperar.
“En la región de Jerson, el ejército ruso dejó atrás las mismas atrocidades que en otras partes de nuestro país que los rusos ocuparon. Los investigadores ya documentaron más de 400 crímenes de guerra. Se están encontrando los cuerpos de los asesinados, tanto civiles como militares” afirmó Zelenski en su discurso matutino diario.
El máximo representante de la Unión Europea en materia de Asuntos Exteriores, Josep Borrell, cree que se trata de un momento decisivo. Para Borrell la retirada de tropas rusas de Jerson es un “punto de inflexión” en la guerra.
De igual modo, afirma que lo que ocurra tras este hecho en los próximos días será de vital importancia. Asegura que esto puede afectar negativamente al ejército ruso, que probablemente sienta la liberación de Jerson como una gran derrota.
Fuente: El Mundo
