El indicador de IPC, publicado hoy por el INE, revela un incremento de seis décimas en el mes de julio.
La presión de los precios ejercida sobre la economía española se mantiene en la misma línea. La tasa interanual alcanza el 10,8%, un valor que no se alcanzaba desde septiembre de 1984. Esta evolución se ha producido principalmente a la inflación de los precios de los alimentos, bebidas no alcohólicas y electricidad.
La evolución de los precios y el IPC
Las modificaciones en los precios siguen afectando a la economía española, puesto que todas las revisiones económicas van ligadas a reducir las estimaciones de crecimiento de PIB y a aumentar las de la inflación.
La subida de precios en España comenzó tras finalizar el verano de 2021, provocado principalmente por los precios de la energía. Como consecuencia de todo ello, el IPC medio anual cerró el año con un valor de 3,1%.
Lo que en un principio parecía una subida coyuntural, se ha transformado en un problema continuo en las cestas de la compra. Y todo ello debido a los efectos de la guerra en Ucrania, la cual parece alargarse en el tiempo.
Esta subida de precios golpea duramente a los ciudadanos, quienes han perdido un gran poder adquisitivo de compra. Con el mismo dinero que antes, no alcanzan a comprar los mismos productos.
Una aproximación del impacto que podría tener la escala inflacionista en las rentas sería de unos 110.000 millones de euros de reducción de poder de compra.
Por esta razón, desde principios de 2022 el Gobernador del Banco de España propuso la idea de la conveniencia de realizar un pacto de rentas con el fin de evitar que los repuntes de los precios se interiorizaran en el conjunto de la economía.
Tras el fracaso entre los agentes sociales en lograr este pacto por la vía de acuerdos en moderación salarial, la vicepresidenta económica hizo una convocatoria de esta mesa de negociación en la que pidió moderación de márgenes y salarios por un plazo de 3 años, aunque si se comprometió a elevar el Salario Mínimo interprofesional (SMI).
Recientemente un informe del Instituto de Estudios Económicos señalaba que los costes laborales explicarían un 83,4% del aumento de los precios entre 2019 y 2021.
Fuente: Cinco Días
