«Ella Reforma» es una asociación creada con el objetivo de «cambiar la realidad» y facilitar el acceso de las mujeres al mercado laboral sin miedo a los estereotipos de género. Uno de los sectores es el de la construcción, objetivo principal del proyecto.
Durante el confinamiento de 2020, García Torrent, pedagoga especializada en recursos humanos y orientación laboral, se decidió fundar ‘Ella Reforma’, el que es su proyecto de formación para generar oportunidades y empleo para las mujeres. Esta organización tiene el fin de ampliar los recursos y las posibilidades de su inserción laboral femenina en el sector de la construcción y la reforma.
Ahora, ha sido presentado en Jerez de la Frontera (Cádiz), donde empezarán a operar buscando crear vínculos con administraciones y centros de formación, aunque desean que se extienda a otros puntos de España, para que la inclusión en este sector se convierta en una realidad tangible.
«Sabemos que no va a haber una avalancha inmediata de mujeres y de empresas interesadas pero estas cosas salen adelante por constancia y paciencia, dando pequeños pasos en favor de la igualdad», ha declarado la responsable del proyecto, mostrándose totalmente optimista.
Un sector puramente masculino
La construcción sigue siendo el sector industrial con el menor número de mujeres empleadas, según los últimos datos de la EPA. Únicamente el 9% de las personas que trabajaban en la construcción eran mujeres, «un porcentaje que no ha mejorado en los últimos años», según García Torrent. Esto origina la necesidad de crear referentes femeninos en este ambiente laboral, para que finalmente sea «normal en las empresas que las mujeres accedan a estos trabajos».
Se debe producir una metamorfosis estructural en las empresas del sector, ya que «tienen cierta tendencia a buscar hombres para sus plantillas, dejando fuera a las mujeres, que acaban relegadas a sus hogares o a trabajos en sectores como la limpieza, la hostelería o los cuidados», ha amonestado García Torrent.
«Queremos que se abra el abanico de posibilidades de empleo para las mujeres y que, si ven una oferta relacionada con la construcción, no la descarten creyendo que no es para ellas», ha asesorado, insinuando además que la labor está «prácticamente mecanizada, con materiales más ligeros que antaño y sacos de carga menos pesados», por lo que todo se centra en adquirir las destrezas propias del oficio y no solo en tener potencia física. «Es mano de obra lo que se necesita, no fuerza bruta», ha dictaminado.
Fuente: EFeminista
