Un tercio de los niños y niñas no toma nunca yogur en la escuela, aunque está considerado como un alimento de consumo diario en la dieta infantil.
Los padres y madres españoles ven insuficiente la cantidad de yogures que sus hijos comen en el colegio, por lo que más de la mitad, un 53,7%, desean que aumente. Esta es una de las conclusiones del Estudio sobre valores, creencias y hábitos del consumo de yogur por el público infantil en España, elaborado por la Asociación Española de Fabricantes del Yogur y Postres Lácteos Frescos (AEFY), que diagnostica los hábitos de consumo de este lácteo en el contexto de la alimentación de los infantes entre los niños y niñas de 3 y 14 años.
La investigación también revela la escasa presencia en los centros escolares, ya que solo un 32,8%, lo toma, a pesar de que los especialistas reconozcan su importancia para la dieta infantil.
Profunda escasez láctea
El estudio de AEFY también constata que el yogur ha conseguido una importante presencia en los hogares españoles, ya que cerca del 42% de los niños lo toma en casa entre tres y cinco días a la semana. Aunque la recomendación de consumo se sitúa en un yogur al día, la presencia de este alimento en el desayuno, es tan solo del 16,5% en los niños y niñas. El número de menores que lo toman a diario es moderado, tres de cada diez, frente al 23,1% que lo consume al menos de tres veces a la semana.
Sin embargo, el contraste aparece en el análisis del consumo de yogur en los colegios. A cerca del 32,8% del alumnado no se les ofrece esta opción de alimento lácteo y resulta llamativo que el 70,7% de los niños consume menos de 3 yogures semanales en el colegio.
Esta escasez de yogures en los colegios contrasta con el deseo de más de la mitad de los padres de incrementar el número de ellos en los menús de los colegios. Esta brecha es más relevante en los centros públicos, que ofrecen menos de tres unidades a la semana en un 76,6% de las ocasiones. Esta demanda de una mayor presencia de yogur en los colegios, atiende a que los progenitores lo relacionan con la contribución a un beneficio en el crecimiento y desarrollo general de los pequeños y con un favorecimiento a su alimentación.
Fuente: El Español
