Este martes, 13 días después del inicio de la guerra, y cediendo finalmente a la presión de los invasores y de la opinión pública que intensificaba las críticas y los boicots en las redes sociales, la empresa McDonald’s ha anunciado que cierra temporalmente sus aproximadamente 850 restaurantes en Rusia. A su decisión le han seguido poco después anuncios similares de otras icónicas grandes empresas estadounidenses: Starbucks, Coca-Cola y Pepsi.
Los nombres de las cuatro firmas se suman a las casi 300 compañías que han cesado o limitado sus operaciones en Rusia desde que empezó la invasión de Ucrania. Entre las primeras que figuran en la lista son: American Express, Boeing, Ikea, Inditex o Nestle.
Las decisiones de las empresas de abandonar Rusia:
La decisión de McDonald’s que ha anunciado que seguirá pagando a sus 62.000 empleados en Rusia, es una de las más significativas. No sólo por su simbolismo, sino porque la empresa tiene más exposición al tener en propiedad el 84% de los locales. De Rusia y Ucrania, obtiene aproximadamente el 9% de sus ingresos, unos 2.000 millones de dólares.
El peso de la presión social y de invasores en las decisiones empresariales es palpable y se ha hecho visible en el caso de Starbucks. La cadena de cafeterías tiene 130 locales y había anunciado el viernes que destinaría los beneficios de esos establecimientos a ayuda humanitaria en Ucrania. Poco después del anuncio de McDonald’s ha anunciado directamente la suspensión de operaciones.
En los casos de Coca-Cola y Pepsi también hay diferencias. Coca-Cola suspenderá las operaciones en Rusia y Pepsi, suspende la venta de sus refrescos, pero mantendrá la producción y venta de snacks, así como de otros productos esenciales.
Fuente: El Periódico.
