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Se oficializa la prohibición de la venta de coches de combustión en 2023 en Europa

El Pleno de la Unión Europea ha aprobado este miércoles la prohibición de vender vehículos de combustión en Europa a partir de 2035, poniendo así fin a los vehículos diésel y gasolina, así como a los combustibles bio y sintéticos.

Esta ha sido una de las medidas establecidas por la Comisión de Medio Ambiente en su política de descarbonización para alcanzar la neutralidad climática en el año 2025. De esta forma se ha fijado un recorte de las emisiones para los coches nuevos del 65% para 2023 y del 100% en 2035, lo que en un futuro significará el final de los coches de combustión.

Tras aumentar sus objetivos de reducción de emisiones en 2020, la UE ahora quiere proponer nuevas regulaciones para alcanzar esta meta. Los eurodiputados votaron a favor de exigir a los fabricantes de automóviles la reducción de emisiones de sus flotas en un 15% en 2025, un 55% en 2030 y un 100% para el año 2035.

Según Susana Solís, miembro de los comités de Industria y Medio Ambiente del Parlamento Europeo, el resultado de la votación es sumamente positivo, pues se ha decidido no establecer nuevas obligaciones a muy corto plazo, y ofrecer seguridad jurídica a la industria, que tiene que realizar un gran esfuerzo de transformación para alcanzar el objetivo final.

Podemos estar satisfechos tras el trabajo de varios meses, gracias al que hemos logrado que no se impongan objetivos intermedios excesivamente duros. Estos podrían asfixiar a la industria española al adelantar de forma abrupta la transición hacia el coche eléctrico”, ha sostenido.

Por su parte, el Reglamento será en 2027 revisado “para poder asegurar nuestra capacidad tecnológica de alcanzar los objetivos fijados. Ahora la industria tiene una señal fuerte para planificar sus inversiones con un marco legal claro y estable”.

Adiós a la dependencia del petróleo

La organización Transport & Environment (T&E) ha mostrado una clara satisfacción tras la aprobación de estas medidas. Alex Keynes, actual gerente de vehículos limpios de la compañía, considera que el hecho de tener una fecha límite significa que los últimos vehículos de combustión se venderán para 2035. Tal y como afirma, “esto nos brinda una oportunidad de luchar para evitar un cambio climático descontrolado”.

Asimismo, el movimiento ecologista se verá favorecido con la eliminación progresiva de los motores de combustión. La decisión supone una oportunidad histórica para ayudar a acabar con la dependencia del petróleo de la sociedad en su conjunto.

Finalmente, según T&E, la aprobación de estas medidas brindan la certeza que la industria automotriz demanda para aumentar la producción de vehículos eléctricos.

Fuente: ABC

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