La población de España está envejeciendo a ritmos acelerados, algo que puede derivar a problemas económicos y sociales
España es el segundo país de la Unión Europea que más rápido envejece. Las estadísticas indican que la edad mediana de la población española ha aumentado en 4,3 años en los últimos diez años, teniendo la mitad de la población más de 45 años. De hecho, después de Portugal, España es el segundo país de la UE con el mayor aumento en la edad mediana durante los últimos diez años.
A pesar de esto, España no tiene la población más mayor de Europa. Italia (48 años), Portugal (46,8), Grecia (46,1), Alemania (45,8) y Croacia (45,5) tienen una edad mediana más alta. Por otro lado, Chipre e Irlanda son los países más “jóvenes”, con una edad de 38,3 años y 38,8 años respectivamente.
En general, toda la pirámide de edad de la población europea se está transformando debido a la disminución constante de las tasas de natalidad y al aumento de la esperanza de vida. Según los últimos datos publicados por Eurostat, la edad mediana de la población de la Unión Europea ha aumentado en 2,5 años en la última década. Lo que sitúa la edad mediana de los europeos en 44,4 años.
Causas del envejecimiento de España
Al analizar el cambio demográfico de la última década por grupos de edad, se observa que la población infantil ha disminuido ligeramente, junto al grupo de personas en edad de trabajar. Por el contrario, el grupo de personas mayores de 65 años se ha expandido y ahora representa más de una quinta parte de la población, tres puntos más que hace 10 años.
«Los baby boomers resultantes de las altas tasas de fertilidad en varios países europeos tras la Segunda Guerra Mundial van ascendiendo en la pirámide de población y están aumentado el colectivo en edad de jubilación y estrechando la base de población en edad de trabajar», explica el informe de Eurostat.
Además, apuntan los autores del informe, otro aspecto de ese envejecimiento que vive Europa es el envejecimiento progresivo de los propios mayores. «Se prevé que la proporción de 80 años o más aumente dos veces y media entre 2022 y 2100», según las proyecciones de Eurostat. Para esa fecha, se estima que el 31,3% de la población de la Unión Europea tenga más de 65 años, y el 14,6% más de 80.
En el caso de España, el peso de los mayores de 65 en el conjunto de la población es ligeramente inferior a la media europea (20,1% frente al 21,1%), pero también es menor la población infantil (14%). Eso conlleva que la tasa de dependencia (el tamaño de las poblaciones más jóvenes y más mayores respecto a la que está en edad de trabajar) sea del 51,6%, mientras que la media europea es del 56,5%. Esto supone un problema cada vez mayor para la sostenibilidad de las pensiones.
Fuente: Europa Press