Los veranos, cada vez más largos y cálidos, obligan a buscar sistemas de refrigeración como los ventiladores.
Dormir por las noches se convierte en una tarea complicada y los aires acondicionados en muchas ocasiones provocan constipados y dolor de cabeza.
Por esta razón, los ventiladores de techo de diseño se convierten en una alternativa perfecta para refrescar el aire de forma más “natural”. A diferencia del aire acondicionado, mueven el aire de la habitación, consiguiendo enfriarla o incluso calentarla. De esta forma no te levantarás a la mañana siguiente moqueando o con dolor de garganta.
Ventajas de adquirir un ventilador de techo
Una de las principales ventajas de este sistema de refrigeración es el ruido. Los ventiladores de techo son bastante silenciosos. Su instalación es bastante sencilla y te permite la posibilidad de incluir iluminación, obteniendo así ventiladores de techo con luz con una doble funcionalidad.
Otra gran ventaja es su precio. Son mucho más baratos que el aire acondicionado y a la larga consumen menos, lo que supone un gran ahorro energético.
Cuánto consumen los ventiladores
Mientras que los ventiladores de pie consumen de media 90 vatios/hora, los de techo solo consumen 60 vatios/hora. Esto les convierte en la mejor opción en los tiempos que corren, donde la luz no deja de subir.
Además, el aire frío suele ir de arriba a abajo -al igual que el aire caliente circula de abajo a arriba- lo cual es una buena opción tenerlo situado en el techo.
Por otro lado, estos ventiladores te permiten la opción de programar para que estén encendidos durante un tiempo determinado, reduciendo así el gasto.Hay aparatos que ya tiene un temporizador que permite dejarlo encendido 2, 4 o 6 horas (generalmente) pero, en caso de no disponer de uno, siempre puedes poner un temporizador independiente y programarlo para que se encienda y se apague cuando te convenga.
Fuente. El Periódico
