Pediatras y logopedas del archipiélago balear han observado un retraso en la interacción, socialización y adquisición del lenguaje en los más pequeños. Esto se debe al uso de la mascarilla y las restricciones por el Covid-19.
Así lo ha explicado la presidenta de la Asociación de Pediatría de Atención Primaria de Baleares quien ha insistido en que “los niños están empezando a hablar más tarde de lo habitual”. También declara que “lo normal es que al año digan una palabra suelta. A los 18 meses junten dos palabras. Y a partir de los dos años empiezan a elaborar frases más cortas, pero ahora están empezando mucho más tarde.”
Además, la pediatría ha alertado también del incremento en la detección de problemas de neurodesarrollo a raíz de las restricciones. Es decir, niños que presentan dificultades para relacionarse con los demás e incluso presentan rasgos de trastorno del espectro autista.
Por parte de uno de los miembros de la junta directiva ha puntualizado que “a nivel práctico, se ha apreciado un aumento en el retraso a la hora de adquirir el habla, aunque a nivel científico todavía no se ha especificado. Aprendemos a hablar cuando estamos en contacto con otros entornos sociales. Sin embargo, ahora se han visto restringidas las experiencias y, cuantas más tengas, más capacidad de adquirir vocabulario.”
Este retraso se producen en menores de tres años:
Estos retrasos se observan especialmente en menores de tres años que son los nacidos prácticamente durante la pandemia. Además, teniendo en cuenta que han nacido en una sociedad donde la mayoría ha llevado mascarilla, se dificulta el reconocimiento facial. Y si a esto se suma que el niño escucha palabras que no aprecia el movimiento de la boca, es otro obstáculo para que aprenda según que fonemas.
Además, han advertido que estos factores no sólo afectan al lenguaje sino a su desarrollo psicomotor en general.
Fuente: ABC.